AUSENCIA
Sin lamentos ni sollozos me voy de tu lado
No reproches la causa que me obliga a dejarte
¡La vida es así! Me marcho y te he amado...
¡Te amare como siempre sin poder olvidarte!
Quizá al separarnos, por mí sientas desprecio
Tal vez me aborrezcas en la soledad...
Porque quedas huérfano de mis tibios besos,
Porque no habrá en tu vida otra mujer igual.
¿Qué importa lo que pienses, qué importa lo que digas,
si mientras más me alejo, me arrancan más la vida,
Por emprender la senda, de la renunciación?...
Escúchame, conciencia, si no es mejor la muerte
Antes que ir vagando por una sombra inerte,
Buscando a duras penas su pobre corazón...
MARÍA SAAVEDRA